Cuando te enfrentas a un potencial nuevo cliente, tu mejor tarjeta de presentación no son tus productos y servicios, sino cómo estas ayudando a resolver las dificultades de tus clientes actuales y a cubrir sus necesidades. En una conversación telefónica, comenzar tu entradilla con una frase del tipo “Llamo de la empresa X, nos dedicamos a Z” está bien. Pero no añadas una retahíla de tus bondades y virtudes. En cambio, prueba a introducir algo de este estilo: “Entre nuestros clientes solemos encontrar dificultades como ---, o ---. ¿Esto es algo a lo que os estéis enfrentando ahora mismo? " La idea es introducir aspectos en los que tus productos y servicios pueden suponer una diferencia positiva para tu potencial cliente, al resolver dificultades reales a las que se enfrentan otras empreas. Si tu interlocutor se muestra receptivo, puedes avanzar: "¿Podrías hablarme más sobre ello?” De esta forma, estás dando pie a una conversación, y estableciendo las bases para un diálogo que va a continuar y puede terminar concretándose en una venta o un nuevo cliente. Si lo que deseas es fijar una visita comercial, puedes continuar de esta forma: “Creo que podría ser interesante tratar el tema con más tiempo y en detalle. ¿Te parecería bien fijar una fecha para reunirte con uno de nuestros agentes?” Si estás pensando en comenzar una campaña de telemarketing, puedes consultar todas nuestras opciones en nuestra web.
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